Por Redacción
Ante cientos de fieles de Montenegro y sus alrededores, el obispo de la Diócesis de Querétaro, monseñor Fidencio López Plaza, acompañado por el presbítero Ricardo Vargas Vázquez, consagró el Templo y Altar de la Parroquia de San Pablo Apóstol.
La ceremonia se llevó a cabo el 21 de enero, en el marco de la fiesta patronal que cada año se realiza en esa comunidad que forma parte de Santa Rosa Jáuregui, la cual concluirá el próximo domingo.
El ritual de consagración incluyó la apertura de la puerta principal, unción, incensación, revestimiento e iluminación del altar, en donde fue colocada una reliquia de San Rafael Guízar y Valencia, primer obispo mexicano e hispanoamericano canonizado por la Iglesia católica.
“Que este espacio sea rinconcito de cielo donde Dios reúne a sus hijos para bendecirlos y hacerlos sentirse cuerpo, hacerlos sentirse hermanos”, expresó el obispo de Querétaro durante su homilía.
Añadió que “Jesucristo nos enseñó que la alegría que uno siente en la vida, es proporcional al sacrificio que uno hace por los demás, y aquí en este lugar recibimos el sacrificio de miles de hermanos y hermanas que han colaborado para hacer de este espacio la casa de Dios”.
Mientras tanto, el presbítero Ricardo Vargas, quien desde un inicio ha estado al servicio de la Parroquia de San Pablo Apóstol en Montenegro, dijo que la edificación del templo para dar servicio a los fieles es un sueño hecho realidad.
Al concluir la ceremonia de consagración, los asistentes participaron en un convivio, el cual fue amenizado por música de banda.
